de nuevo en San Julian

Una nueva Pascua en San Julian, una vez mas la casa fresquilla, ir a buscar madera, la salamandra a tope todo el día, el jardín que empieza a brotar y una sorpresa  !!!!! UN TULIPÁN !!!! , no recordaba haberlo plantado pero gran ilusión al verlo allá solito pero precioso. El ciruelo este año que no acaba de brotar, sera por la podada que le hicimos y se ha enfadado.
Que bien se esta cuando al dormir no oyes a la vecina de arriba con sus taconcitos a las 10 clic clic clic, con el sonido de los pajaritos y el domingo con el cantar de las caramellas.

Es Pascua, y como siempre no podía faltar su día de lluvia, pero que agradable cuando estas calentito, con un buen libro y dejando pasar el día.

También hemos sacado a Benito para que  disfrute de su jardín después de un invierno resguardado del frío y de las nieves de la plana. Este año los cerezos no acaban de florecer, con tanto frío todo esta a punto pero no, sera una primavera seguramente verde y exhuberante.

Hay cosas que con los años se van perdiendo, pero hoy paseando por mi ciudad he visto que siempre hay quien aún conserva las tradiciones, como la de colgar las palmas y palmones del balcón hasta el año siquiente y ver como se van secando. Lo curioso es que quien colgaba estos palmones  era una persona que me ha llamado la atención pues yo pensaba que su religión pudiera ser otra o que las tradiciones de aquí no estaban tan arraigadas en ellos, ella era una mujer china en un pequeño piso del casco antiguo. Curioso.